Santo Domingo de la Calzada, paseos jacobeos


Santo Domingo de la Calzada. Ubicación geográfica de esta población riojana de poco más de 6.600 habitantes, pero con auténticas hechuras de ciudad por la extensión de su casco urbano y la vocación de algunos de los edificios ubicados fuera de su casco histórico, por no hablar de su reclamo para las poblaciones cercanas en cuestión de servicios, ocio y demás. Una población gestada en torno al Camino de Santiago a partir de las infraestructuras properegrinaje impulsadas en el medievo por un Domingo García que acabó siendo canonizazo [Mapas ViaMichelin].

Santo Domingo de la Calzada. Escudo municipal, fotografiado en la fachada de un edificio de la población, donde aparecen mencionados Castilla, León, una de las encinas que tan frecuentes eran por estos pagos hasta que el santo desarrolló su labor constructiva y, cómo podían faltar, un gallo y una gallina que aluden a una tradición legendaria por todos los lugareños conocida. Una leyenda que forma parte del ADN local y que incluso justifica que siempre haya un gallo y una gallina vivos en la catedral.

La plaza de San Jerónimo Hermosilla se encuentra (o se encontraría) extramuros y es el lugar donde confluyen la carretera que une Burgos y Logroño y la ruta que sube hacia Ezcaray y la Sierra de la Demanda. En su plazuela central no debe sorprender encontrarse una churrería portátil muy volcada con el Athletic Club de Bilbao… estamos en una zona con mucha segunda residencia de vascos, presencia que va a más a medida que nos acercamos a la montaña.

Santo Domingo de la Calzada. Teatro Avenida, en la avenida Juan Carlos I. Espacio multicultural que nació mediado el siglo XX por iniciativa de un empresario del sector, Simeón Murga, aunque pasó a manos del consistorio en la década de los años 70.

Santo Domingo de la Calzada. Paseo peatonal paralelo a la avenida Juan Carlos I, conocido como Paseo del Espolón. Un espacio ideal para ferias de productos típicos y empresas de turismo activo en la comarca. Hablamos de Ojatur, la feria del turismo de la Rioja Alta.

Santo Domingo de la Calzada. Fuente en el Paseo del Espolón.

Santo Domingo de la Calzada. La torre, conocida como La Exenta por su particular ubicación geográfica, es una buena referencia desde muchos puntos del casco urbano. Como aquí, caminando por la calle Alcalde Rodolfo Varona.

Vivienda en la calle El Pinar, rúa paralela al trayecto jacobeo, contemplada desde la calle Alcalde Rodolfo Varona.

Calle El Pinar. Contrastes en las viviendas entre lo más nuevo y un "algo" que no lo es tanto.

Santo Domingo de la Calzada. Un vecino llena una botella con el agua que mana de esta vieja fuente en la céntrica plaza de la Alameda.

Plaza de la Alameda. Surtidor de agua vetusto, erosionado y solemne. Es del siglo XVIII, como toda la plaza, que fue un espacio urbano de nueva concepción para facilitar el abasto de los vecinos. El agua, con origen en el manatial de Los Mártires.

Variedad de tiempos, y a cada tiempo un tipo de soportal, en la plaza de la Alameda. La imaginamos, en otro tiempo, tomada por los peregrinos que salían de los albergues y disfrutaban del descanso y tal vez un vino.

Plaza de la Alameda. Soportales más antiguos.

En los soportales de la plaza de la Alameda, puestos de productos artesanales en el marco de la Ojatur. Aquí, el puesto de encurtidos y aceitunas de Juanjo y Conchi. Como apuestas por la elaboración propia y nos sorprendieron con unas aceitunas rellenas de membrillo realmente sorprendentes, les invitamos a acercarse a su negocio. En la foto aparece un móvil de contacto.

Cecinas y embutidos en otro puesto ubicado en la plaza de la Alameda.

En la plaza de la Alameda, allí donde comparte trecho con la ruta jacobea de la calle Mayor, la Casa de la Cofradía del Santo. Uno de los edificios más conocidos y queridos de Santo Domingo de la Calzada que, además, desde 1968, acoge el albergue de peregrinos de esta población. Y un museo, justo al lado, de vocación "carretera".



Volvemos a cruzar la plaza de la Alameda para regresar a la calle Isidoro Salas y sus fachadas decimonónicas.

Torreón de la antigua muralla bajomedieval en la calle Sor María de Leiva.

Santo Domingo de la Calzada. Abadía Cisterciense, también conocido como monasterio de Nuestra Señora de la Anunciación. En la calle Mayor.

Tren turístico que, por un euro, y con tickets a la venta en la oficina de turismo vecina, hace un pequeño recorrido muy completo en cuanto a información por el casco histórico de Santo Domingo de la Calzada.

Hermosísima escultura sobre el peregrino a Santiago que representa diferentes modos de abordar el Camino (senderismo, bicicleta...). Una escultura útil, en tanto que es también fuente.

Kilómetro 550. Oficina de Turismo, y espacio cultural de pequeñas dimensiones, de Santo Domingo de la Calzada.

Calle Mayor. Apariencia palaciega con un alero en mal estado de conservación...

Calle Mayor. Contraste entre timbres y telefonillo. Compensado, eso sí.

La plaza de la Alameda y la Torre Exenta, contempladas desde la Calle Mayor. Todo tieso, hacia Santiago de Compostela.

La esbelta y espectacular Torre Exenta, contemplada desde la calle Mayor.

El tren turístico recorre la calle Mayor de Santo Domingo de la Calzada justo a la altura de la Casa de Lorenzo de Tejada (observen la fachada con el detalle heráldico).

La casa de Lorenzo de Tejada, contemplada desde la Calle Santo Domingo de Silos, cuello de botella que nos permite alcanzar la plaza de España junto a un flanco de la catedral.

Plaza del Santo. El corazón de Santo Domingo de Silos. Edificio del Parador de Turismo, que ha evolucionado sobre el antiguo hospital de peregrinos creado en el siglo XII.

Plaza del Santo. Ermita de Nuestra Señora de la Plaza, la patrona municipal.



Catedral de Santo Domingo de la Calzada, con parte de la Torre Exenta a su derecha. El templo ha evolucionado muchísimo. La portada de la Plaza del Santo es hermosa y no hay que olvidar que, respetando una leyenda presente hasta en su escudo municipal, en su interior se crían un gallo y una gallina. Esta imagen nos permite, además, hacernos una idea muy clara de las dimensiones y la disposición de esta plaza.

Catedral de Santo Domingo de la Calzada. Portada de la plaza del Santo. Portada Sur. San Celedón (izquierda) y San Emeterio (derecha) escoltan a Santo Domingo de la Calzada.

La Torre Exenta de Santo Domingo de la Calzada. Aunque las perpectivas, engañosas ellas, nos hacen creer que estamos ante una parte más de la catedral, lo cierto es que cuando arrivamos al entorno del templo descubrimos que no es así. Sí, es el campanario de la catedral. Un campanario que sirve de otero sobre toda la zona gracias a su gran altura (sus 70 metros la convierten en la torre más alta de La Rioja) y a que se puede visitar, previo pago claro. Pero este campanario del siglo XV, el tercero que se construyó para la catedral, fue levantado ligeramente al margen por una cuestión de corrientes subterráneas y cimentación. Este problema obligó a desmontar la segunda propuesta, mientras que la torre "original" fue destruida por el incendio consecuente de un rayo.

Santo Domingo de la Calzada. Cruce de calles allí donde se ubica la ermita de Nuestra Señora de la Plaza. Y callejeros que nos evocan a las placas utilizadas, por ejemplo, en Bilbao.

Dentro del "tren turístico" que recorre el centro de Santo Domingo de la Calzada y que cuesta un simbólico euro... Nos sorprendió la gran cantidad de gente del lugar que recurría a este servicio como medio de ocio con peques y no tan peques.

Puerta de Margubete. Fortificación con arco ojival que se podría decir que, frente a la Casa de los Trastámara, se incrustó en la catedral.

Caminando bajo la sorprendente Puerta de Margubete.

Santo Domingo de la Calzada. Fachada con toques tradicionales en la calle del Cristo.

Calle del Cristo. A la derecha, instalaciones de la catedral de Santo Domingo de la Calzada. Y acceso turístico.

El empedrado "revisionista" de la calle del Cristo.

Al final de la calle del Cristo, viniendo desde la calle Mayor, a nuestra vera izquierda, damos con este gran edificio histórico. Es el Palacio del Secretario, o Palacio del Secretario de Carlos V, una morada sufragada por Juan de Samano en 1544. De Samano, nativo de la villa, ejercía de secretario de Carlos V. Hoy en día, un colegio de gestión religiosa.

La canasta del patio de la Agrupación Escolar Beato Jerónimo Hermosilla.

La Torre Exenta, contemplada desde las cercanías de la Plaza de España.

Un empedrado algo más "viejuno".

Agrupación Escolar Beato Jerónimo Hermosilla. Revisionista y funcional solemnidad constructiva.

Santo Domingo de la Calzada. Ayuntamiento. Este viejo edificio con soportales acoge estas funciones desde el siglo XIX. Presidiendo, el escudo de Felipe V.

Plaza de España. A la izquierda, más estrecho, la antigua Alhóndiga; a la derecha, haciendo esquina con la calle Los Corralones, el edificio del Corregimiento de La Rioja (mediados del siglo XVIII).

Detalles heráldicos en la fachada de la antigua Alhóndiga de Santo Domingo de la Calzada.

La plaza de España de Santo Domingo de la Calzada, con la Torre Exenta emergiendo sobre los tejados y vistas sobre las traseras de la catedral, contemplada desde los soportales del edificio del ayuntamiento. Siendo amplísima, no es una plaza al uso más castellano ni tampoco cuenta con esa frecuente ubicación céntrica; es más, creció a los pies de la muralla. Precisamente los mejores restos del muro están cercanos a este espacio urbano.

La catedral de Santo Domingo de la Calzada, importante templo del Camino de Santiago, que es cruel con la contemplación con ese efecto óptico de integrar la torre en su conjunto... Medio siglo después de la muerte de Santo Domingo, en 1109, se comenzó a levantar un templo que estéticamente está muy remozado en las centurias siguientes.

"En medio de bosque roturo camino y el mismo se hizo calzada para el peregrino". Versos inscritos en una lápida en un espacio ajardinado vecino de la catedral y ubicado en el arranque de la calle Santo Domingo de Silos, realmente un cuello de botella entre la Plaza de España, la calle Mayor y la Plaza del Santo.

Arquivoltas, aleros y canecillos en la catedral de Santo Domingo de la Calzada, todos ellos escoltados por la majestuosa Torre Exenta.

Canecillos.

La Torre Exenta, en otra imagen que nos invita a pensar en una torre inscrustada en la catedral. Una torre de gran belleza.

En un capitel algo deteriorado, representación humana y remate decorativo de aparente naturaleza geométrica.

Santo Domingo de la Calzada. Murallas. O mejor dicho, restos de las mismas. Del recinto con más de kilómetro y medio de perímetro, de hecho una milla, hasta siete puertas y sus 38 torreones desafiantes apenas quedan tramos aislados y, en la zona conocida como Las Traseras, que es la que nos compete, un lienzo cuyos bajos han sido aprovechados con fines de almacenaje y demás.

Murallas de Santo Domingo de la Calzada. Aunque existieron varias antes, éstas corresponden a los tiempos de las guerras civiles castellanas del siglo XV. Y siempre jacobeas, eso sí.

Santo Domingo de la Calzada. Murallas.

Murallas. Estado de un sector del principal núcleo que se conserva, en la avenida de Burgos.

El enorme Convento de San Francisco, actualmente exclaustrado y, a partes iguales, parados de turismo y taller de restauración del patrimonio artístico. La foto está tomada en el arranque del paseo del Espolón y la avenida Juan Carlos I.

Calle Mayor. Aquí, donde hoy transita la avenida de Burgos, en otro tiempo existió una puerta.

Calle Mayor. Edificio de tres alturas y hechuras palaciegas.

Palacio en venta en la calle Mayor. Se trata del que ordenó construir el alcalde Juan Martínez de Pisón en el primer tercio del siglo XVII.

La heráldica de Martínez de Pisón.



Santo Domingo de la Calzada. Calle Mayor, tramo "en poblado" del Camino hacia Santiago de Compostela.

Calle Mayor. Vista parcial de la antiquísima Casa de los Trastámara.

La Torre Exenta, contemplada desde la Calle Mayor ante la Casa de los Ocio y la Antigua Carnicería Municipal.

[abril de 2015]